En marzo de 2014, Michelle Bachelet e Isabel Allende asumieron los dos máximos cargos de poder político e institucional en Chile –presidenta de la República y presidenta del Senado, respectivamente-. Ese mismo mes, la presidenta anunció la creación del ministerio de la Mujer y la Equidad de Género. Paradójicamente, por esos días, la bebida gaseosa Limón Soda, lanzaba una campaña publicitaria que incluía piezas audiovisuales que mostraban a jóvenes en actitudes de acoso callejero, las que están penadas por la ley chilena (grababan con sus celulares sus escotes o sus piernas, por ejemplo). El spot coincidió con una campaña pública contra el acoso callejero
y varias organizaciones criticaron la publicidad de Limón Soda y presentaron una denuncia al Consejo Nacional de Autorregulación y Ética Publicitaria (CONAR), pidiendo sancionar a la empresa responsable.
Autorregulación y Ética Publicitaria C. N. de. (2015). Documento CONAR Sobre Publicidad Sexista. Comunicación Y Medios, (30), Pág. 225 – 236. https://doi.org/10.5354/rcm.v0i30.32574